Y es que esta parte del cuerpo es uno de los pilares del golf y asume una gran importancia dentro del terreno de juego. El movimiento repetitivo de la muñeca, excesiva presión en el grip o directamente un grip inadecuado son algunos de los factores desencadenantes de dicha lesión.

A continuación, os dejamos algunos consejos para prevenir esta lesión, pues las manos y muñecas son nuestros grandes aliados a la hora de dirigir la trayectoria de la bola y tener una correcta rutina de prevención es clave para no apartarse nunca del juego.

Como en cualquier deporte, la principal prevención de esta dolencia la encontramos realizando ejercicios de calentamiento previos al partido o a la sesión de tiró. El cuerpo debe saber que vamos a empezar a necesitar de su potencial y la única manera de lograrlo es calentando correctamente.

Sobre todo, si eres principiante o intermedio, comprueba que el material utilizado va acorde a tu constitución física y nivel. La elección de un material adaptado para cada jugador es crucial para garantizar tu salud. 

Si empiezas a notar molestias en la zona, el primer punto a corregir tiende a ser el swing. Asegúrate que tanto la técnica como el movimiento son los correctos.

La musculatura es el órgano que tiene nuestro cuerpo para protegerse, y los golfistas carecen en su mayoría de la musculatura flexora y extensora de la muñeca y del antebrazo. Potenciar la musculatura en esta zona te ayudará al largo plazo.

Mientras juegues, utiliza una presión ligera de grip y realiza lentamente el backswing para acortar el exceso de movimiento de la muñeca.

También, si notas molestias de manera continua es recomendable valorar el uso de muñecas ortopédicas y acudir a que te realicen una radiografía.

Y si acabas de salir de una lesión, es muy recomendable colocar siempre la bola en un tee para cada swing completo.

Ahora ya sabes como prevenir esta lesión que tan molestos nos tiene a los golfistas.

Nos vemos en Empordà Golf Club.